Una anciana viuda evoca con nostalgia su pasado el día en que cumple los ochenta años, analizando con resignación su presente. Estos pensamientos le llevan a rebelarse contra una realidad, que es esa sensación de inutilidad que suele tener el ser humano cuando llega a determinada edad, sobre todo si determinados signos externos se lo están recordando constantemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario